El corazón de fuego

Érase una vez dos amigos, uno se llamaba Daniel y otro Rafa. Iban caminando por una calle   de Dambil, cuando Rafa se encontró algo que parecía tener forma de corazón, de color rosa brillante y en el centro de color naranja fuego, cuando la tocó, Rafa notó que estaba fría y dura, a pesar de no ser muy grande, se notaba que había dejado un enorme agujero en el suelo, del tamaño de un caballo. Después de estudiarlo un rato, se dieron cuenta de que era un meteorito. Entonces decidieron ir juntos a buscar a un mago que seguramente sabría lo que era aquello y si tenía algún tipo de poder mágico.

Cuando llegaron a la casa del mago Drin, le enseñaron la piedra. Al verla, el mago, dijo:

- ¡Ahh! ¡Qué cosa más bonita! Parece ser extraterrestre, seguro que tiene magia ¿Dónde la habéis encontrado?

- La hemos encontrado en la calle, en Dámbil, había dejado un agujero enorme en el suelo, por eso lo hemos traído, creemos que es muy especial- dijo Daniel.

-Seguro que es muy especial – dijo Rafa.

- Venid dentro de diez minutos – dijo Drin

- Dentro diez minutos vendré –dijo Daniel.

Se fueron de la casa de Drin mientras  el mago la estudió, pasaron los diez minutos,  Rafa y Daniel le tocaron a la puerta, él abrió y le dijo:

- Tomad asiento. Esta piedra tiene unos visitantes que vienen de una estrella, es de una especie extraterrestre. La piedra  tiene  tres poderes. El primero la capacidad de ver el futuro, tiene la capacidad de leer la mente a otra persona y te vuelve invisible cuando tú quieres. Se fueron de la casa del mago. Dijo Daniel:

- Vamos a dársela a Titón, le servirá para la guerra de Górmul.

Llegaron al Bastión y subieron por los  portales y por las piedras de salto. Y le dijeron a  Titón:

- Es una piedra que  tiene tres poderes, el primero es ver el futuro, el segundo que puedes leer la mete a otro persona y el tercero te puedes volver invisible cuando tú quieras.

- Muy interesante- dijo Titón y  Daniel y Rafa se fueron de Bastión con la piedra.

Daniel tenía los ojos verdes, era alto y tenía el pelo rubio. Rafa tenía el pelo negro, alto y los ojos marrones. Al día siguiente Titón, los mandó a que le robaran la Hoz Sombría a Górmul.

Ya casi llegando al norte vieron el castillo donde vivía Górmul, entraron al castillo y le robaron la Hoz Sobria y salieron corriendo. Estuvieron dos días y dos noche caminando Daniel y Rafa estaba muy cansados ya casi no podían caminar, les faltaban el agua. Daniel se cayó al suelo Rafa desesperado pidió ayuda. Salió del bosque un duende y los animó mucho. A los diez minutos Daniel se levantó del suelo, pasaron diez horas llegaron al Bastión le dieron la piedra Daniel se acostó en su cama y Rafa también se acostó pues estaban muy cansados


Escrita por Aarón Utrera